Noor

Aprovechando el puente del «Día das Letras Galegas» el 17 de mayo, nos desplazamos a la histórica ciudad de Córdoba, que, además, inauguraba ese día su feria anual, llena de colorido y alegría. En este vibrante contexto, nos aventuramos a explorar la alta gastronomía local, comenzando por Noor, un restaurante con tres estrellas Michelin que destaca por su cocina creativa y su ambiente que evoca la Córdoba andalusí.

Noor ofrece tres tipos de menús degustación: Mudéjar, Morisco y Al-Yazira. Como siempre, elegimos el más largo y completo, Al-Yazira, ansiosos por descubrir cada una de las elaboraciones cuidadosamente diseñadas por el chef Paco Morales. El menú Al-Yazira es una auténtica travesía por sabores y técnicas culinarias que reflejan la rica herencia gastronómica de Al-Ándalus.

La Experiencia Al-Yazira

Aperitivos

El viaje comenzó con una serie de aperitivos que nos prepararon para la sinfonía de sabores que estaba por venir:

Pan negro, garbanzo, mole y mahonesa de anchoa: Una combinación intrigante que ofrecía una complejidad de texturas y sabores, el pan negro crujiente contrastaba con la suavidad del mole y la mahonesa de anchoa.
Aliño de pepino y menta naranja: Fresco y revitalizante, perfecto para abrir el apetito.
Tartar de ciervo y calabacín con rosas: Delicado y exótico, con un toque floral que elevaba el sabor del ciervo.
Buñuelo de queso con azafrán y bonito: Un bocado explosivo, donde el queso cremoso y el azafrán se fusionaban en perfecta armonía.

Platos Principales

Los platos principales fueron un despliegue de creatividad y maestría culinaria:

Codorniz pochada en maíz acidulado, morcilla y almendra encurtida: Una interpretación moderna y elegante de ingredientes tradicionales.
Bogavante hervido descascarillado, emulsión de su coral, nabo blanco y cardamomo: Mar y tierra en un plato de impecable presentación.
Cuajada de khan, yema de huevo de campo, caviar, chile habanero y alcaparrón: Un plato que combinaba suavidad y potencia de sabores.
Ostra macerada, gelé de espinaca, nata de oveja y escabeche de pimiento verde: Una delicia marina que sorprendía por su frescura.
Karim de piñones tostados y manzana verde con ras-alhanout: Un plato equilibrado con el dulzor de la manzana y la calidez del ras-alhanout.
Gamba al natural, endivia, caviar, papada Joselito, especias del desierto y vinagre PX: Una creación que homenajeaba el lujo y la simplicidad del mar.
Pasta de trigo duro, mantequilla ahumada, fondo de gallina y calamar: Confortante y elegante, un plato que evocaba la tradición y la modernidad.
Lubina curada, anchoa, botarga y pepino encurtido: Fresco y umami, con una presentación impecable.
Pimiento naranja, trigo sarraceno crujiente, picaña de buey y labne: Un plato robusto y lleno de carácter.
Espárrago blanco con guisante tierno y rebozuelo: Primaveral y delicado, un placer para los sentidos.
Merluza al vapor con calabaza y vainilla: Una combinación inusual que resultó ser sublime.
Pichón asado y reposado con tomates tatemados, apio, chile de árbol y trufa negra: Un plato que cerraba los principales con una nota alta, rico y profundo en sabor.

Postres

Los postres fueron el broche de oro a esta experiencia gastronómica:

Melocotón, caviar y queso: Un contraste dulce y salado que sorprendía en cada bocado.
Naranjas del barrio con azahar, almendra frita y aceite de oliva: Un homenaje a los sabores tradicionales de Córdoba.
Helado de berenjena, dátiles y sésamo blanco: Innovador y delicioso, una combinación única.
Tarta de algarroba: Un final perfecto, rica y satisfactoria.

La Experiencia en Noor

A lo largo de nuestra visita, la atención del personal fue excelsa, cada detalle estaba cuidado al máximo, aunque se olvidaron de ponernos las servilletas en los postres, un desliz menor en una experiencia globalmente perfecta. Además, la presentación de los platos en loza local añadía un toque de autenticidad y conexión con la cultura andalusí.

En definitiva, salimos de Noor encantados y profundamente impresionados. Cada plato era una obra de arte, tanto en presentación como en sabor, reafirmando su merecida posición entre los mejores restaurantes con estrellas Michelin. Noor no solo ofrece una comida, sino una experiencia que transporta a través del tiempo y la historia de Córdoba.